Los residentes del norte de Calgary se despertaron por la mañana del lunes con un apagón digital, resultado de un intento fallido de robar cobre que cortó accidentalmente una línea crítica de fibra óptica. La interrupción dejó a los clientes de Shaw de algunas partes de la zona sin acceso a los servicios de Internet, televisión y teléfono, sumiéndolos en la incomodidad y la frustración.

Según una actualización publicada sobre las 9 de la mañana en la página de cortes de servicio de Shaw, los equipos de reparación se movilizaron rápidamente para solucionar el problema. Sin embargo, debido a la complejidad de los daños, el restablecimiento del servicio no será inmediato. Las estimaciones de reparación oscilan entre 8 y 12 horas, dependiendo de que los técnicos puedan comenzar su trabajo de forma segura.

A pesar de las dificultades, Shaw ofreció un rayo de esperanza, indicando que se estaba buscando una solución temporal. Esperaban que algunos clientes empezaran a recuperar la conectividad en unas cinco horas, aunque reconocían que el proceso podría alargarse si los daños eran importantes.

Rogers, la empresa matriz de Shaw desde el año pasado, reveló un preocupante aumento de las interrupciones atribuidas al vandalismo desde 2022. Estas interrupciones no solo causan molestias a los clientes, sino que también conllevan tiempos de reparación considerablemente más largos, hasta tres o cuatro veces más de lo habitual, debido a los cuantiosos daños sufridos.