En su más reciente decisión, el Banco de Canadá ha optado por mantener su tipo de interés básico en el 5% por sexta vez consecutiva desde julio. El Gobernador, Tiff Macklem, subrayó que el banco vigilará de cerca los indicadores de desaceleración sostenida de la inflación antes de plantearse recortes de las tasas.

Dirigiéndose a los periodistas, Macklem reconoció la impaciencia del público por saber cuándo podría bajar el banco su tipo de interés oficial. Indicó que, aunque las tendencias recientes muestran un descenso de la inflación subyacente, caracterizado por una reducción en sectores volátiles como la alimentación y la energía, el banco necesita más tiempo para evaluar la durabilidad de este descenso.

“La respuesta corta es que estamos viendo lo que necesitamos ver, pero necesitamos verlo durante más tiempo para confiar en que el progreso hacia la estabilidad de precios será sostenido. El nuevo descenso de la inflación subyacente es muy reciente. Necesitamos estar seguros de que no se trata de una caída temporal”, declaró Macklem.

Insinuando la posibilidad de un recorte de las tasas en junio, Macklem subrayó la necesidad de pruebas sostenidas de la relajación de la inflación. A pesar de que la inflación de febrero se redujo al 2.8%, impulsada por la desaceleración de varios sectores, como los bienes, los alimentos, la ropa y los servicios, el aumento de los costes de los alquileres y de los intereses hipotecarios sigue impulsando la tasa de inflación general.

El banco prevé que la inflación se acerque gradualmente a su objetivo del dos por ciento este año, y que se alcance en 2025. Por otra parte, se espera un fuerte crecimiento del PIB en el mismo plazo, impulsado por la expansión de la población y el aumento del gasto de los hogares.

Reflexionando sobre la agresiva estrategia del banco para frenar la inflación, que comenzó con subidas de las tasas de interés en marzo de 2022, dando lugar a un total de 10 incrementos en menos de dos años, Macklem subrayó el compromiso del banco de garantizar una estabilidad económica sostenida.
“Al considerar cuánto tiempo más debemos mantener el tipo de interés oficial en el nivel actual, buscamos pruebas de que la reciente relajación de la inflación subyacente se mantendrá”, afirmó Macklem.

La cautela del Banco subraya el delicado equilibrio entre el apoyo al crecimiento económico y la gestión de las presiones inflacionistas, y los próximos meses ofrecerán una visión crítica de la trayectoria de la economía canadiense.