El incendio forestal que amenaza Fort Good Hope se encuentra ahora a menos de un kilómetro de la comunidad, lo que suscita preocupación por la posible pérdida de estructuras por la noche. Según la última actualización de N.W.T. Fire, el incendio ha crecido significativamente de cinco hectáreas a unas 200 hectáreas debido a los fuertes vientos y a la prolongación de la luz del día.

Mike Westwick, oficial de información sobre incendios, indicó que el viento ha cambiado al noreste, empujando el fuego más cerca de la ciudad. Los esfuerzos se centran en evitar que el fuego cruce la carretera del aeropuerto, una barrera crítica.

“Estamos trabajando incansablemente para proteger a la comunidad”, declaró Westwick, señalando que se están desplegando más recursos y personal en la zona. A pesar del deterioro de la visibilidad, los aviones cisterna siguen activos y continúan los vuelos de evacuación.

Los residentes han sido evacuados a Norman Wells, Deline, e Inuvik, con el primer vuelo saliendo de Fort Good Hope a las 8:15 p.m. Cinco aviones, proporcionados por Air Tindi y Summit Air, están transportando aproximadamente 110 residentes por vuelo a un lugar seguro. Más de 250 personas se han registrado para la evacuación, y los esfuerzos continuarán hasta que todas las personas que lo necesiten estén fuera.

La comunidad, que carece de carreteras para todas las estaciones, depende del transporte aéreo y por barco. El jefe Pierrot ha instado a los residentes a llevar poco equipaje, documentos esenciales y medicamentos.

En Norman Wells, el alcalde Frank Pope informó de que los voluntarios están ofreciendo refugio y comidas a los evacuados, con instalaciones preparadas para acogerlos. El fuego está siendo combatido activamente con medios de extinción adicionales, como camiones cisterna y aviones cisterna pesados, y hay más unidades y un equipo de gestión de incidentes en camino.

Algunos residentes, como el anciano Frank T’seleie, están optando por evacuarse en barco a campamentos cercanos a lo largo del río Mackenzie, con gasolina proporcionada por el gobierno de la comunidad.

A medida que se desarrolla la situación, Fort Good Hope sigue amenazado, pero los esfuerzos coordinados y el apoyo de la comunidad están garantizando la seguridad de los residentes.