En un giro impactante, tres jugadores del equipo de fútbol Vélez Sarsfield enfrentan arresto domiciliario mientras que otro ha sido puesto en libertad condicional, todos acusados de abuso sexual contra una joven en la provincia argentina de Tucumán.

La jueza Eliana Gómez Moreira ordenó el arresto domiciliario por 90 días para los argentinos Braian Cufré y Abiel Osorio, así como para el paraguayo José Florentín, quienes serán monitoreados con tobilleras electrónicas y tendrán restricciones adicionales, incluyendo una fianza de 50 millones de pesos y la prohibición de acercarse a la supuesta víctima. Por otro lado, el arquero uruguayo Sebastián Sosa fue puesto en libertad condicional, con la condición de residir en Buenos Aires y presentarse ante la justicia tucumana cada 15 días, además de no poder salir del país durante tres meses.

Las acusaciones surgieron después de que una joven periodista denunciara haber sido violada por los cuatro jugadores en un hotel de Tucumán, luego de un partido del equipo. A pesar de las negativas de los acusados, la jueza convalidó los delitos imputados por la fiscalía, incluyendo abuso sexual con acceso carnal agravado.

Este escándalo no es el primero en involucrar a jugadores de Vélez Sarsfield, ni tampoco es único en el fútbol argentino. Casos anteriores han sacudido al deporte, destacando la importancia de abordar seriamente estas acusaciones y garantizar una respuesta justa y equitativa para todas las partes involucradas.