Reportes de fallos en los sistemas de McDonald’s a nivel mundial llevaron al cierre temporal de restaurantes y generaron quejas en redes sociales. La cadena de comida rápida describió el incidente como un “apagón tecnológico” y aseguró que no fue resultado de un ciberataque. McDonald’s Japón informó sobre la interrupción de operaciones en varios establecimientos debido a un “fallo en el sistema”. La aplicación móvil de McDonald’s también experimentó problemas, según informes de Downdetector.

A pesar de los contratiempos, algunos restaurantes volvieron a operar normalmente, con clientes recibiendo sus pedidos en lugares como Bangkok, Milán y Londres. En Bangkok, se colocaron carteles explicativos mientras que en Milán, un técnico asistió para solucionar los problemas. McDonald’s Dinamarca confirmó que el “fallo tecnológico” fue resuelto y que los restaurantes estaban abiertos.

Clientes de McDonald’s en diferentes países, desde Australia hasta Reino Unido, expresaron frustración por los problemas con sus pedidos. Las redes sociales se llenaron de quejas, incluyendo fotos que mostraban puestos de comida cerrados. Aunque la situación parece estar mejorando, el incidente destaca la vulnerabilidad de las empresas ante fallos tecnológicos y su impacto en la experiencia del cliente.