O.J. Simpson, ex estrella de la NFL y ampliamente reconocido por su infame juicio por doble asesinato en la década de 1990, ha fallecido a los 76 años tras una batalla contra el cáncer.

La familia de Simpson confirmó la noticia el jueves, compartiendo que estaba rodeado de sus hijos y nietos cuando falleció el 10 de abril.

La familia publicó un comunicado en la cuenta X de Simpson, pidiendo privacidad y gracia en estos momentos de pérdida.

La carrera de Simpson en la NFL abarcó nueve temporadas con los Buffalo Bills y dos con los San Francisco 49ers, lo que le convirtió en uno de los portadores de balón más grandes de la historia. En 1973, se convirtió en el primer jugador de la NFL en correr más de 1828 metros en una sola temporada. Sus logros deportivos le valieron entrar en el Salón de la Fama en 1985.

Sin embargo, la vida de Simpson dio un giro dramático a mediados de la década de 1990, cuando fue juzgado por el doble asesinato de su ex esposa, Nicole Brown Simpson, y del amigo de ésta, Ron Goldman. Finalmente fue absuelto de los cargos, lo que desencadenó uno de los juicios más controvertidos y sonados de la historia de Estados Unidos.

A pesar de su absolución en el juicio penal, Simpson fue declarado responsable civil y condenado a pagar más de 33 millones de dólares a las familias de las víctimas. También se enfrentó a problemas legales en 2007, que le llevaron a prisión por robo a mano armada y otros delitos graves.

En los últimos años, Simpson se enfrentó a una crisis de salud tras revelar que se le había diagnosticado cáncer y se estaba sometiendo a quimioterapia. Su fallecimiento marca el final de una vida tumultuosa y llena de historias que incluyó tanto logros deportivos notables como importantes controversias legales. Su familia pide privacidad y respeto por su pérdida.